in

MSI Claw A1M: la consola portátil con Windows 11 que busca su lugar entre las grandes

El mercado de las consolas portátiles para gaming vive un momento dorado. La popularidad de dispositivos como la Steam Deck o la ASUS ROG Ally ha demostrado que existe un público amplio dispuesto a invertir en experiencias de PC gaming en formato compacto. En ese contexto, MSI presentó la Claw A1M, una propuesta ambiciosa que, aunque pasó desapercibida en su lanzamiento, hoy empieza a ganar relevancia gracias a mejoras de software y a un precio más competitivo.

La Claw A1M no es una consola tradicional. En realidad, es un PC de bolsillo con diseño de consola, impulsado por hardware Intel y con la ventaja de correr Windows 11 de forma nativa. Este detalle, que en un principio fue motivo de críticas por la falta de optimización, se ha transformado en uno de sus mayores atractivos frente a alternativas basadas en Android o en sistemas operativos propietarios.

E


Especificaciones técnicas: potencia de PC en formato portátil

La MSI Claw A1M incorpora un conjunto de componentes que la coloca en la liga de las portátiles gaming serias:

  • Procesador: Intel Core Ultra 5.
  • Memoria RAM: 16 GB LPDDR5.
  • Almacenamiento: 512 GB SSD, ampliable vía ranura microSD o reemplazo interno del SSD.
  • Pantalla: panel IPS de 7 pulgadas, resolución 1080p y frecuencia de actualización de 120 Hz.
  • Diseño: chasis ergonómico pensado para largas sesiones de juego, con controles integrados en la misma estructura.

Esta configuración garantiza fluidez en títulos AAA y un desempeño sólido en eSports, con la ventaja de poder expandir almacenamiento fácilmente. La pantalla de 120 Hz es un punto diferencial frente a otras consolas que aún trabajan con 60 Hz, lo que se traduce en una experiencia visual más responsiva.


Windows 11 como plataforma: ventaja o desafío

El mayor diferencial de la Claw A1M es, sin duda, la inclusión de Windows 11 como sistema operativo. Esto abre el acceso a todo el ecosistema de PC gaming:

  • Compatibilidad total con bibliotecas como Steam, Epic Games Store, Xbox Game Pass y GOG.
  • Soporte para mods, emuladores y software adicional, un terreno donde las consolas Android quedan cortas.
  • Versatilidad de PC completo: además de juegos, puede usarse para productividad ligera, multimedia o incluso como estación de trabajo portátil si se conecta a periféricos externos.

Ahora bien, esta decisión también plantea un reto: Windows 11 no fue diseñado originalmente para una consola portátil. La interfaz requiere ajustes y optimizaciones que MSI ha ido puliendo con actualizaciones. Desde su lanzamiento, la marca ha mejorado la experiencia de usuario, aunque sigue siendo recomendable que los usuarios más avanzados investiguen configuraciones en foros para obtener el máximo rendimiento.


El factor precio: una segunda vida para el Claw

Uno de los motivos por los que el Claw A1M ha recuperado protagonismo es su nuevo precio de $390 en Best Buy, lo que representa un descuento de $260 respecto a su costo inicial.

MSI Claw A1M

En este rango de precio, pocas opciones con Windows ofrecen el mismo nivel de hardware. La Steam Deck sigue siendo una referencia indiscutible, pero su sistema basado en Linux presenta limitaciones de compatibilidad. La ASUS ROG Ally, por su parte, es más potente pero también significativamente más cara. El Claw se posiciona como una alternativa intermedia: no alcanza el nivel más alto de rendimiento, pero ofrece compatibilidad universal y un costo accesible.


Comparativa frente a Android y otras consolas

  • Frente a Android:
    Las consolas Android son más asequibles y ligeras, pero dependen casi exclusivamente de juegos móviles o de streaming en la nube. Esto limita la experiencia a títulos menos exigentes o a una conexión estable de internet. El Claw, en cambio, ejecuta juegos nativos de PC con todo el potencial de su hardware.
  • Frente a Steam Deck:
    El ecosistema de Valve ofrece integración perfecta con Steam y una comunidad muy activa, pero la compatibilidad con títulos fuera de la plataforma requiere ajustes adicionales. El Claw, con Windows 11, elimina esta barrera al permitir instalar cualquier juego de PC directamente.
  • Frente a ROG Ally:
    La propuesta de ASUS lidera en potencia, pero a un costo que duplica el de la MSI Claw. Para quienes priorizan el presupuesto sin querer sacrificar el acceso a Windows, el Claw se convierte en una opción más lógica.

Evolución vía software: un producto que madura

La historia de la Claw A1M demuestra cómo el software puede redimir a un hardware competente. Aunque el lanzamiento inicial fue criticado por la falta de pulido en la experiencia, las actualizaciones constantes han mejorado tanto el rendimiento como la estabilidad.

Esto refleja un modelo más cercano al de las PC que al de las consolas clásicas: el hardware permanece, pero el software evoluciona. Y en un ecosistema como el de Windows, esa evolución puede prolongar la vida útil del dispositivo más allá de lo esperado en otras plataformas.


Conclusión: una apuesta distinta dentro del ecosistema portátil

La MSI Claw A1M no es perfecta, pero representa un enfoque distinto en el terreno de las consolas portátiles. Su combinación de hardware de nivel PC, pantalla de alta frecuencia y, sobre todo, la inclusión de Windows 11 como sistema operativo, la convierten en una máquina flexible y abierta.

En un mercado donde Android se queda corto por limitaciones de catálogo y las consolas cerradas dependen de ecosistemas rígidos, el Claw ofrece libertad total: instalar lo que quieras, jugar donde quieras y usarlo incluso como mini-PC.

Con un precio actual de $390, la Claw A1M deja de ser una curiosidad de nicho para convertirse en una opción realista para jugadores que buscan un punto medio entre potencia, compatibilidad y costo. Puede que no desbanque a la Steam Deck ni a la ROG Ally, pero se gana un lugar propio: el de la consola portátil que se comporta como una PC completa.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

ssd falla en Windows 11

Windows 11 y el “fantasma” de los SSD dañados: qué pasó realmente con la última actualización